Antonio Vivaldi fue conocido por la innovación en sus composiciones, la rapidez con la que las hacía y la influencia que tuvo su música en otros compositores.
Su sonido se caracteriza por la estructura formal y rítmica de los conciertos, en los que existen contrastes armónicos y melodías y temas innovadores, y por tener composiciones llamativas y llenas de vitalidad. Sus sonatas instrumentales, por ejemplo, son más conservadoras que sus conciertos y su música religiosa suele reflejar el estilo operístico de la época y la alternancia de orquesta y solistas.
Durante su carrera, Vivaldi compuso alrededor de 865 obras incluyendo cerca de 46 óperas, así como sonatas, composiciones vocales, cantatas de cámara y música coral sacra. Entre sus obras están ‘Il cimento dell’armonia e dell’inventione’, los famosos conciertos para violín que incluyen a ‘Las cuatro estaciones’, piezas destacadas dentro de la música programática por su capacidad para evocar ideas e imágenes en la mente de quien las escucha.